Sociedad y medioambiente. Un espacio compartido: Agotamiento de los recursos
¿Te has preguntado alguna vez… cuántos recursos naturales se necesitan para mantener tu estilo de vida?
Puedes hacer una estimación calculando tu huella ecológica.
La huella ecológica representa: "el área de territorio productivo (cultivos, pastos, bosques o ecosistema acuático) necesaria para producir los recursos utilizados y para asimilar los residuos producidos por una población definida con un nivel de vida específico".
Es decir, la huella ecológica de una persona es la cantidad de terreno necesaria para producir los recursos que consume y asimilar los residuos que genera.
1.- ¿Qué son los recursos naturales y cómo se pueden clasificar?
Un recurso natural es todo aquello que el ser humano obtiene de la naturaleza para satisfacer sus necesidades.
El ser humano usa tres tipos de recursos naturales:
Puedes hacer una estimación calculando tu huella ecológica.
La huella ecológica representa: "el área de territorio productivo (cultivos, pastos, bosques o ecosistema acuático) necesaria para producir los recursos utilizados y para asimilar los residuos producidos por una población definida con un nivel de vida específico".
Es decir, la huella ecológica de una persona es la cantidad de terreno necesaria para producir los recursos que consume y asimilar los residuos que genera.
1.- ¿Qué son los recursos naturales y cómo se pueden clasificar?
Un recurso natural es todo aquello que el ser humano obtiene de la naturaleza para satisfacer sus necesidades.
El ser humano usa tres tipos de recursos naturales:
NO RENOVABLE: Existen en una cantidad limitada en la Tierra y pueden llegar a agotarse, puesto que son regenerados por la naturaleza en escala de tiempo geológicas
EJEMPLO: Son los recursos minerales, incluyendo los combustibles fósiles (carbón mineral, petróleo, gas natural). |
RENOVABLE: No se agotan por más que se utilicen.
EJEMPLO: Son de este tipo la energía solar, el viento, las mareas, las olas, etc… |
POTENCIALMENTE RENOVABLE: Pueden ser regenerados por la naturaleza en escalas de tiempo humanas si se usan de un modo y a un ritmo adecuados.
EJEMPLO: Gran parte de los recursos que utilizamos son de este tipo: el agua dulce, los bosques, las especies animales y vegetales, el suelo, el aire, etc. |
2.- Los recursos naturales se agotan ¿Por qué?
El constante aumento de la población y del desarrollo tecnológico a lo largo de la historia de la humanidad, ha exigido utilizar recursos cada vez más variados y en mayores cantidades. Si te fijas en los gráficos que tienes a la derecha observarás cómo la población mundial y el consumo energético han tenido un crecimiento similar. Como puedes observar este crecimiento ha afectado a los recursos no renovables y los potencialmente renovables, hasta el punto de que en la actualidad nos enfrentamos a un grave problema que puede llegar a acabar con la civilización actual: el agotamiento de los recursos: LOS COMBUSTIBLES FÓSILES: Los combustibles fósiles son hoy día el principal recurso empleado como fuente de energía. Su agotamiento representa el problema más grave al que se enfrenta la sociedad actual.
Pero los recursos potencialmente renovables también están en peligro de agotarse debido a que no se utilizan ni del modo ni al ritmo que permita su regeneración por la naturaleza. |
LOS RECURSOS HÍDRICOS:
O lo que es lo mismo el agua dulce disponible, disminuye vertiginosamente debido a los excesos de consumo en los países desarrollados, al desmesurado aumento de la población y a las técnicas agrarias y ganaderas intensivas. A esta sobreexplotación hay que añadir el progresivo deterioro de la calidad del agua, como consecuencia de los vertidos contaminantes. LOS RECURSOS PESQUEROS: También también corren peligro de agotarse debido a la sobreexplotación de los caladeros, el uso de técnicas de pesca agresivas, los vertidos contaminantes y la disminución de la cantidad de agua dulce que llega al mar. LOS RECURSOS FORESTALES: Los recursos forestales (los bosques) también desaparecen poco a poco, como consecuencia de los incendios, la necesidad de nuevos pastos y tierras de cultivo y, principalmente, porque la madera se sigue empleando como combustible por gran parte de la humanidad. EL SUELO CULTIVABLE: El suelo cultivable desaparece como consecuencia del crecimiento de las ciudades y la necesidad de suelo para las industrias. La deforestación contribuye a la pérdida de suelo, que, sin la presencia de la cubierta vegetal, se degrada rápidamente y desaparece, sobre todo en las zonas tropicales. LA BIODIVERSIDAD: La biodiversidad, es decir, la cantidad de ecosistemas distintos del planeta, junto con la de especies distintas que pueblan cada ecosistema, y la diversidad genética dentro de cada especie, constituye un valiosísimo recurso natural que se reduce de modo preocupante. La razón principal está, precisamente, en la alteración y la destrucción de muchos ecosistemas, junto con las prácticas monocultivo agrícolas de, la introducción de especies exóticas, la caza, exterminio y explotación de ciertas especies y los problemas globales de contaminación. |
3.- Los recursos naturales se agotan... ¿y qué se puede hacer?
Encontrar una solución global y completa al problema del agotamiento de recursos exige un cambio importante en el modo en el que la humanidad se relaciona con su entorno.
Se puede actuar sobre el problema desde dos ámbitos complementarios:
Encontrar una solución global y completa al problema del agotamiento de recursos exige un cambio importante en el modo en el que la humanidad se relaciona con su entorno.
Se puede actuar sobre el problema desde dos ámbitos complementarios:
- A escala global, desde gobiernos y grandes compañías:
- Promover el uso de fuentes de energía renovables.
- Fomentar la agricultura y ganadería ecológicas.
- Regular las técnicas de pesca y proteger a las especies durante los periodos de cría (paros biológicos), así como fomentar la acuicultura.
- Desarrollar campañas de educación ambiental.
- Proteger determinados ecosistemas mediante declaraciones de parques naturales y reservas de la biosfera.
- Y otras mil cosas más que se nos pudieran ocurrir.
- A escala local, con la adopción de ciertos hábitos de consumo, que nos permiten usar menos recursos (combustibles, agua, energía eléctrica) y hacerlo de modo más eficiente en nuestro día a día.
- A escala global, desde gobiernos y grandes compañías: